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Pasear por Marrakech es todo un placer para los sentidos, pues en la Medina se puede encontrar de todo lo inimaginable, cosas verdaderamente maravillosas y otras extrañísimas, desde un museo hasta una tienda de especies donde los olores invaden parte de la calle.
Nos enseñaron varios Riads ubicados en sitios insospechados y cuando entras en ellos, es como sí cambiarás de mundo, pues un mundo de fuentes, luces, olores, muebles ...te transportan a otros países y a otros siglos.
La Mamounia situado junto a los muros de la Medina y rodeado de un precioso jardín, fue desde sus comienzos sinónimo de lujo, distinción y glamour.
En 1922, con la llegada de los franceses a Marrakech, se decidió
la construcción de un hotel orientado a una clientela europea principalmente, deseosa de un espacio de relax y alimentada por la literatura y los sueños exóticos.
La lista ha sido muy larga de artistas y personalidades que han sido atraídos por La Mamounia.
Fotos de mgo y de viviendolos50, último collage hecho con fotos de Pinterest del hotel La Mamounia.
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